Hoy volví a besar tus labios
hoy toqué tu boca nuevamente,
probé el dulce vino de tus besos
hoy apareciste de mis sueños
y mis sábanas impregnadas
con el suave aroma
de tu piel canela,
despertando en mí un torbellino de emociones
que había guardado en lo más profundo de mi ser.
Cada caricia era un recuerdo de nuestras noches pasadas,
donde el tiempo se detenía y el mundo desaparecía
mientras nuestras almas se entrelazaban
en un baile eterno de amor y deseo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario